Friday, June 10, 2011

Adiós a la "chorbi-agenda"

10 de Junio de 2011


Punto y a parte. Hasta aquí hemos llegado. Borrón y cuenta nueva. Finito. San se acabó. Caput. Bye bye. Ayer hice lo correcto, o al menos es lo que mi cuerpo me pedía, y de paso también mi cabeza. Decidí borrar mi "chorbi-agenda". Quizás os parezca una tontería y, probablemente, lo sea pero creo que borrándola avanzo un poco más en el terreno, ¿cómo lo diría? ¿sentimental? No sé. Hay que diferenciar entre "polvo-agenda" y "chorbi-agenda" para que todo se entienda mejor. La "polvo-agenda" podríamos decir que está compuesta por aquellas personas con las que uno, o una, no tiene mayor intención que la de pasar un buen rato en la cama, o donde sea. La "polvo-agenda" no implica sentimientos. La versión chorbi sí. Son personas con las que has estado o has sentido algo más especial. Seguramente de ninguna te hayas enamorado, no tiene porqué implicar amor. Quizás porque la cosa se truncó o te cortaron las alas en el momento en el que te vieron con ilusión de más historia. Pero jode como un zapateao en la boca del estómago cuando ves a esas personas de ligoteo con otra en la discoteca. Y mucho. No tienes la necesidad ni el derecho a recriminarle nada, y de hecho no lo deberías hacer, pero jode, y encima se lo recriminas (Oh dios mio!). Él o ella es libre, puede hacer lo que le venga en gana, si quiere hasta puede hacer un bukake en medio de la pista. 



Tú no eres nadie para recriminarle nada pero ¿qué ocurre cuando vienen los momentos de bajón? aquellos en los que la baja autoestima te abre el corazón sin miramiento, entra, se mueve por dentro sin compasión y terminas sintiéndote peor que Falete en un restaurante vegetariano. En ese momento puede que le llames, le envíes un mensaje y quedes como el típico arrastrad@. El sábado me pasó. Era el alcohol. Le envié un mensaje y el domingo, en plena resaca, viendo no se qué peli tonta, no paraba de darme con la palma de la mano en la frente: "¿por qué lo has hecho Sergio? ¿por qué?". La otra persona (la "deseada") se siente especial, se congratula como un pavo real con el esplendor de sus plumas. Sabe que te tiene ahí y cuando os veis te saluda, dedicándote la típica sonrisa de galán de los años 50  queriéndote decir "a qué estoy bien, eh? a qué te gusto?". Lo mejor es borrar la "chorbi-agenda" y con ella a toda esa gente con la que sabes que nunca podrás tener nada (y de paso rezar por no verles con nadie nunca. Si eso pasa, tener cerca a un buen amigo o a una buena amiga cerca que te agarré, sin darte cuenta, y te lleve al otro extremo del local como si no hubiera visto nada, aunque parezca que le ha dado un "algo" de golpe y tú no entiendas nada).  

La "chorbi-agenda" ya no existe. La he borrado. Hacedlo, os sentiréis genial. Suspiro, me siento mejor e incluso me siento otro, más liberado, de repente... ¡Sergio!

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